Lajos Zilahy |
Estudió
Derecho en la Universidad de Budapest antes de servir en el ejército
austro-húngaro durante la Primera Guerra Mundial. Esta experiencia le sirvió
para escribir una de sus obras más conocidas y que más éxito internacional le
dio, Las cárceles del alma (traducida
ahora como Dos cautivos). Posteriormente
fue periodista en París y Londres. De regreso a su país, escribió novelas de
gran éxito en las que realiza un análisis de la sociedad de su época lleno de
sátira. Primavera mortal (1922), Algo flota sobre el agua (1928), El desertor (1931), El alma se apaga (1932) y La
ciudad errante (1939) son algunas de las obras de este período. El autor
centra su atención en los problemas morales y las vicisitudes sociales que
envolvían a las clases burguesas europeas del período de entreguerras, aunque
posteriormente se fue decantando por el análisis de otros grandes grupos
sociales de poder, como la aristocracia y las altas esferas financieras.
En
1930 se casa con Piroska Bárcy, hija del alcalde de Budapest. Sus convicciones democráticas lo forzaron al exilio en 1948 junto a su
amigo, el también conocido novelista, Sándor Márai. Lajos Zilahy abandona
Hungría en 1947, y se establece en Estados Unidos, donde escribe sobre su país
de origen y su juventud, abandonando el papel más combativo que había adquirido
en la etapa anterior. Cultiva una prosa bastante menos ácida en su sátira
social, ahora suavizada por la evocación nostálgica de tierras lejanas y
tiempos pasados. De esta época es una de sus obras más conocidas, Los Dukay,
una trilogía de novelas no escrita en orden cronológico que narra la historia
de una ficticia familia aristocrática desde la época de Napoleón hasta la mitad
del siglo XX, a la que corresponden las novelas El siglo feliz (1960), Crepúsculo cobrizo (1949) y El ángel enfurecido
(1953).
Lajos
Zilahy nunca volvió a Hungría, murió en Novy Sad (Serbia) donde tenía una casa
a la que acudía frecuentemente. Sus cenizas fueron llevadas a Budapest tal como
había establecido en su testamento.
Primavera mortífera es la primera novela del Lajos. Ahora la Editorial Funambulista está recuperando toda
la obra de este autor en la colección Biblioteca Lajos Zilahy.
La novela narra, en forma epistolar, el drama existencial de un joven aristocrático de provincias de la Hungría de principios de siglo por causa de un amor frustrado. El protagonista escribe una carta a un amigo de la infancia donde le relata sus vivencias y los motivos de la situación desesperada en la que se encuentra. La novela está ambientada en Hungría y el marco que la rodea es la Europa decadente de comienzos de siglo que camina inexorablemente hacia la primera guerra mundial.
La novela narra, en forma epistolar, el drama existencial de un joven aristocrático de provincias de la Hungría de principios de siglo por causa de un amor frustrado. El protagonista escribe una carta a un amigo de la infancia donde le relata sus vivencias y los motivos de la situación desesperada en la que se encuentra. La novela está ambientada en Hungría y el marco que la rodea es la Europa decadente de comienzos de siglo que camina inexorablemente hacia la primera guerra mundial.
La
novela ha sido definida como una obra maestra de la novela clásica de amor. Algunos de los
elementos más destacados de esta obra serían:
- La perfecta construcción de una
trama que nos va desvelando poco a poco los detalles de la historia y las
vivencias del protagonista.
- La reconstrucción de un
escenario (Budapest en particular y Hungría, en general) de grandes
contrastes que se precipita hacia su decadencia.
- La plasticidad de las
descripciones que establecen una interesante relación entre naturaleza y
estados de ánimo, como en las más características obras románticas.
- La delicadeza e intensidad de
las emociones y pasiones descritas que nos muestran toda una galería de
sentimientos opuestos pero complementarios como son el amor, los celos, la
cólera, la ambición, el deseo, la pasión, la fascinación, el desprecio,
etc. que nos habla de la naturaleza humana con sus fortalezas y
debilidades.
- El lenguaje sutil, poético, delicado,
preciso pero, en muchas ocasiones, alambicado y bastante remilgado.
- El ritmo narrativo marcado por
un movimiento continuo de los personajes que no cesa ni en los momentos de
más introspección y que tiene su eco en la propia naturaleza que los
acompaña con sus claroscuros y su música ambiental.
Cartel de la película |
Fotograma de Primavera mortal |
Novela epistolar al modo de Carta de una desconocida de Zweig, pero con tono más melodramático, anclado en el más puro romanticismo decimonónico. Por ello, menos implicación emocional del lector en la trama que en las novelas de Zweig. Sin embargo, deliciosa de leer por la elegancia en el análisis psicológico del protagonista, aunque el personaje más bonito lo constituya el de la mujer que se convertirá en su futura esposa. Como lectora hembra, muestro rechazo contra las escenas de violencia del protagonista sobre esta mujer.
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